jueves, 19 de noviembre de 2009

Impresión


Aviso: Esto no es una culeolada de las requisitorias en este blog, solo una impresión de algo que me causó impresión (la redundancia es a propósito), y como cientista social tengo que comentarla.

Arriba a la derecha se encuentra un sondeo que muestra que dos tercios de las personas (de las participantes, obvio) no querrían volver a enamorarse. Sinceramente me esperaba topar con resultados completamente opuestos. ¿Será que soy demasiado culeola? ¿será que sigo pasándome de idealista? ¿o será más bien que soy masoquista?

No sé, de pronto sigo pensando que, como dice fito, 'lo importante no es llegar, lo importante es el camino'. Yo no creo que haya un amor eterno y perfecto y vivieron felices para siempre, pero sí creo que cada vez vale la pena, aunque termine, aunque tenga final y ese no sea precisamente feliz. Después de todo esto se trata de vivir y sentir cosas fuertes y yo 'para aburrirme prefiero sufrir' (Say no more).

Sentir o no sentir, he ahí el dilema...

2 comentarios:

Kri§ dijo...

Surcando los anchos mares hacia ningún lugar... Salto de cama en cama, de boca a boca, de falda en falda... Y no vuelvo por donde vine, nunca miro hacia atrás.

Todos sufrimos el mismo dolor.

Luciérnaga Enojada dijo...

Ujúm. Todos sufrimos el mismo dolor.

Pero...

Considero que, no se debería tomar un "dolor amoroso" como algo malo (puf, ahora yo con discursos amorosos).

Creo que las personas, cada una de nosotras, entiende las cosas como quiere, como le place o bien, como le ronca el c#%&. ¿Por qué no recordar los buenos ratos que dejó ese "amor"? ¿Por qué no repensar sobre lo sucedido y aprender de esas experiencias?

Simplemente porque a la gente no le da la gana... Porque a veces -de verdad esto sucede muchísimo- las personas juegan de víctimas cuando las mismas también fallaron dentro de una relación pasada. Sí jóvenes, las parejas son de dos (son de dos, repito).

No sé, pero vivir amor tras amor tras amor sin sentir un poco de ese "ácido" se me hace un bostezo. A dónde irá la juventud de hoy Jesucristo...

En fin, mucho bla bla.

¡Saludos!